El reto principal de este proyecto de reforma, reside en el espacio limitado a 50 metros cuadrados repartidos en las dos plantas que tiene el inmueble. Por lo que hay que hacer un ejercicio adicional para que se pierdan el mínimo de confort con respecto a una casa de mayores proporciones.
En este sentido, se llega a una solución de distribución en la que se deja la planta baja como cocina y living con un baño y la planta primera para dormitorio con vestidor y baño integrado.
fachada
vista general
planta baja
Falso tabique que oculta la escalera y aloja el televisor y la chimenea con leñero.
cocina con barra.
vista desde la cocina
distribución de Primera planta.
Para separar la cama del vestidor y el WC, se ha dispuesto un plato de ducha en el interiror de un falso muro, dotado, para darle ligereza, de un vidrio translúcido.
Diseño de mueble de baño y WC integrado.
Con el panel de separación de vidrio con bajorelieves, conseguimos intimidad sin restar luz y profundidad.
Distribución de cubierta.
Cubierta transitable con huerto urbano.
Otro de los problemas era el llevar luz natural a las zonas de la casa alejadas de los huecos en la fachada principal, sobre todo a los baños. Para ello, se ha dispuesto un lucernario sobre la escalera que baña de luz desde la cubierta, obteniendo así luz durante todo el día, y para poder conducirla hasta la planta baja se dispone de un suelo transitable de vidrio en la meseta de la primera planta. Con ese lucernario, solucionamos no sólo un problema de luz, sino también de regulación de temperatura al tener apertura automática.
Al tratarse de una construcción muy antigua, sus muros están conformados por piedras de diferentes tipos y tamaños, por lo que se propone la limpieza y tratamiento de los mismos y así dejarlos vistos sin revestimiento. De esta forma conseguimos un hilo conductor natual y de gran calidez para la decoración del hogar. Junto con esto, se propone la demolición de la escalera existente para reemplazarla por una estructura metálica revestida de mármol marrón emperador para las huellas y mármol crema marfíl para las tabicas, o mejor dicho, frentes de cajoneras, pues cada peldaño es un cajón oculto con el que aprovechar el hueco de la escalera, que en una casa de estas dimensiones es casi imposible. La otra parte del hueco de escalera, se aprovecha para alojar una chimenea con la que dar calor a toda la vivienda mediante conductos a cada estancia. Como refuerzo de esta estructura metálica, se dispone un panel a base de tiras de mármol marrón empreador que a la vez que oculta la escalera, sirve para alojar un televisor y equipos de audio y video.